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Termostatos
La calefacción es uno de los gastos más elevados de un hogar en invierno. En los meses de más frío (Diciembre, Enero y Febrero) puedo suponer hasta un 50% de las facturas mensuales, además del gran consumo de energía que supone tener todo el día la calefacción en marcha. Precisamente para la reducción del consumo de energía se utilizan los termostatos y los cronotermostatos.
Termostatos digitales: la temperatura perfecta para tu hogar
El termostato consiste en un aparato conectado a una fuente de calor con el que se consigue regular la temperatura y mantenerla sin que suba o baje. Existen dos tipos de termostatos: los tradicionales y los digitales. Los termostatos tradicionales son los que hay en muchos de nuestros hogares y que están compuestos por una rueda que nos permite reducir o elevar la temperatura del hogar. Los termostatos digitales, en cambio, son mucho más modernos y exactos. Disponen de una pantalla digital con la que se puede ver la temperatura del ambiente y regularla con mucha más exactitud. Estos últimos permiten graduar la temperatura de tu hogar de una forma mucho más eficiente y ahorrar dinero en tu factura.
Cronotermostato: un paso más de programación
A diferencia de los termostatos, los cronotermostatos son aparatos con mucha más precisión y mejor equipados. Gracias a ellos, se puede programar la temperatura deseada en el hogar durante días e incluso semanas. De ahí, que se consiga optimizar toda la energía utilizada para calentar nuestro hogar en los momentos que más la necesitemos, como por ejemplo: podemos programar nuestra calefacción para que se encienda justo una hora antes de que lleguemos a casa. Su interfaz es totalmente digital, por eso también podemos establecer con el número exacto de grados de temperatura que queremos que haya en nuestra casa.
¿Cómo funciona un termostato? ¿Y un cronotermostato?
Los termostatos y los cronotermostatos son sistemas de control que están conectados a una caldera y abren y cierran un circuito eléctrico según la temperatura que nosotros programemos. Estos aparatos se utilizan en los sistemas de calefacción con radiadores conectados a una caldera general llena de agua. Esta agua recorre las tuberías hasta llegar a los radiadores distribuidos por todo nuestro hogar. La función de los termostatos y los cronotermostatos es sencillamente activar o desactivar la calefacción activando o desactivando la llama que calienta el agua que recorre toda la casa. Una vez el agua se enfría retorna a la caldera para volver a ser calentada.
Instalar un termostato o un cronotermostato
Si estás convencido en utilizar estos aparatos para ahorrar en tu factura de calefacción, tenemos una gran noticia para ti: la instalación es muy sencilla. Además en nuestra web encontrarás todas las herramientas necesarias para que puedas realizarla tú mism@.